Verano en Nueva Inglaterra: 9 excursiones costeras de un día desde Boston

El verano tiene algo mágico en Nueva Inglaterra. Cuando llega el buen tiempo y la ciudad empieza a vibrar con la energía de los festivales, los conciertos al aire libre y los cafés al aire libre, resulta imposible ignorar la llamada de la costa. Por suerte, Boston está perfectamente situada para los excursionistas que deseen escapar del bullicio de la ciudad y explorar los pueblos costeros, las islas portuarias y las emblemáticas playas que hacen de Nueva Inglaterra un lugar espectacular para visitar.

Desde encantadoras calles principales repletas de tiendas de antigüedades y galerías de arte, hasta playas vírgenes donde la brisa marina se funde con el aroma del marisco fresco, las excursiones costeras de un día desde Boston ofrecen un poco de todo. Tanto si es un aficionado a la historia que sigue los pasos del primer asentamiento de peregrinos, un gastrónomo con antojo de rollos de langosta y sopa de almejas, o un amante de la playa que simplemente busca relajarse cerca de las olas, hay una excursión perfecta esperándole.

En esta guía le llevaremos de viaje por algunos de los mejores destinos costeros a los que se puede llegar en poco más de una hora desde Boston. Desde las famosas mansiones de Newport, en Rhode Island, hasta las arenosas costas de Cape Cod, el embrujado encanto de Salem y las escapadas isleñas de Martha's Vineyard y las islas del puerto de Boston, cada lugar promete su propia mezcla de aventura, relax y el inconfundible encanto de Nueva Inglaterra.

Así que haga la maleta, coja las gafas de sol y prepárese para explorar el lado costero del verano, porque estas excursiones desde Boston no sólo están cerca, sino que merecen la pena.

1. Cape Cod: El encanto clásico de la costa

Si sueña con arena entre los dedos de los pies, rollitos de langosta en una terraza soleada y faros de postal, Cape Cod es la excursión costera de un día por excelencia desde Boston. A sólo un par de horas en coche, este tramo de la costa de Nueva Inglaterra está repleto de hermosas playas, pueblos encantadores y ese ambiente relajado y salado que todos anhelamos en verano.

Comience su viaje en Sandwich, la ciudad más antigua del Cabo, donde la historia y el paisaje van de la mano. Los Heritage Museums & Gardens ofrecen un tranquilo comienzo del día, especialmente a principios de verano, cuando las flores están en plena floración. Desde allí, recorra la Ruta 6A, un pintoresco trayecto repleto de tiendas de antigüedades, encantadoras calles principales y suficientes paradas fotográficas para llenar el carrete de su cámara.

Para disfrutar de la playa, Marconi Beach, en Wellfleet, ofrece amplias playas vírgenes, imponentes dunas y, con marea baja, extensos bancos de arena perfectos para vadear. Mantén los ojos bien abiertos, las focas suelen hacer acto de presencia. Si le apetece algo más cultural, las galerías de arte locales de Cape Cod están llenas de obras inspiradas en el océano, especialmente en ciudades como Provincetown y Orleans.

Y, por supuesto, ninguna visita al Cabo está completa sin degustar sopa de almejas, rollitos de langosta y marisco fresco en un restaurante local. Ya sea explorando los centros de investigación marina de Woods Hole, fotografiando un emblemático faro o simplemente relajándose en una tumbona de playa, Cape Cod le promete un día de relax en el que se sentirá como en unas minivacaciones.

2. Martha's Vineyard: Ambiente isleño y brisa marina

Súbase a un ferry rápido desde Woods Hole y en menos de una hora llegará a Martha's Vineyard, una apreciada escapada veraniega que combina la elegancia rústica con el encanto clásico de Nueva Inglaterra. Conocido por sus impresionantes vistas, sus tiendas de recuerdos y sus famosos, el viñedo es una excursión deensueño desde Boston, especialmentepara quienes desean un ritmo más pausado y una dosis de vida isleña.

¿Primera parada? Oak Bluffs, famosa por sus coloridas casitas de pan de jengibre, su bullicioso puerto y su alegre energía. Pasee por Main Street, explore pintorescas boutiques y cómase un cucurucho de helado casero antes de bajar a la playa. Si viaja con niños pequeños, Oak Bluffs ofrece aguas tranquilas y muchos espacios verdes para jugar.

Para disfrutar de un ambiente más relajado, diríjase a Edgartown, donde las hermosas playas, las vallas blancas y las casas pintorescas crean un ambiente atemporal. No olvide pasar por uno de los restaurantes del puerto para degustar algunos de los mejores mariscos de la isla,como las ostras locales o el clásico rollo de langosta.

Si le gusta la naturaleza, dé un paseo a pie o en bicicleta por la costa, o diríjase al extremo de la isla para ver los acantilados de Aquinnah y el faro de Gay Head, dos de los monumentos más emblemáticos de Vineyard. Tanto si está mirando cómo atraca el ferry como disfrutando de la hora dorada en el puerto, Martha's Vineyard ofrece una gran belleza, encanto y ambiente isleño, todo en un solo día inolvidable.

3. Newport, Rhode Island: El glamour de la Edad Dorada se une a la belleza costera

A poco más de una hora al sur de Boston se encuentra Newport(Rhode Island), una joya costera que mezcla opulencia, historia y belleza natural como ninguna otra. Conocida sobre todo por sus famosas mansiones de Newport, antaño lugar de veraneo de las élites de la Edad Dorada, esta ciudad ofrece una impresionante mezcla de grandeza arquitectónica y playas espectaculares.

Empiece el día con el emblemático Cliff Walk, un sendero de 4,5 km donde el océano Atlántico choca contra las rocas a un lado y se alzan mansiones ornamentadas al otro. Las vistas aquí son sencillamente impresionantes, y la brisa marina es una grata compañía mientras se avanza por el sendero.

A continuación, diríjase a la ciudad para explorar galerías de arte, tiendas de antigüedades y lugares históricos como Fort Adams. El centro de Newport rebosa de tiendas con encanto y calles adoquinadas, perfectas para ir de compras o disfrutar de un almuerzo relajado. Si le gusta el marisco (¿y a quién no?), éste es el lugar ideal para saborear langosta fresca, cremosa sopa de almejas o un plato de ostras crudas mientras contempla los barcos que se mecen en el puerto.

Para adentrarse más en la fastuosa historia de la zona, una visita a The Breakers o a Marble House le transportará directamente al mundo de la extravagancia de los Vanderbilt. Tanto si viaja en coche como si desea añadir Newport a su lista de excursiones costeras de un día desde Boston, esta encantadora ciudad de Nueva Inglaterra es un destino que no puede perderse y que consigue ser a la vez grandioso y maravillosamente realista.

4. Plymouth: La historia se encuentra con el mar

Pocos lugares combinan la historia de Estados Unidos con el encanto de la costa como Plymouth. Como lugar del primer asentamiento de peregrinos, esta ciudad portuaria al sur de Boston ofrece algo más que una lección de historia: es toda una experiencia de Nueva Inglaterra en una memorable excursión de un día.

Su visita debe comenzar en Plymouth Rock, la emblemática (aunque sorprendentemente modesta) roca que marca la llegada de los peregrinos en 1620. A continuación, suba a bordo del Mayflower II, una réplica a escala real del barco que los transportó a través del Atlántico, o explore los lugares históricos de los alrededores que le transportarán a la época colonial.

Pero Plymouth no es sólo pasado. Su costa es encantadora en verano, con playas vírgenes en las que tomar el sol, construir castillos de arena o simplemente disfrutar de las vistas del océano. ¿Tiene hambre? El paseo marítimo de la ciudad está salpicado de restaurantes informales y marisquerías clásicas donde podrá degustar rollitos de langosta con mantequilla, sopa de almejas o vieiras fritas, todo ello con vistas al puerto.

Si lo que busca es pasar un día relajado, pasee por Main Street, visite tiendas con encanto o tómese una bebida fría mientras ve los barcos entrar y salir. Plymouth también es ideal para los niños pequeños, gracias a su mezcla de atracciones accesibles a pie, historia práctica y amplios espacios abiertos.

Tanto si es un amante de la historia local como si simplemente desea explorar una ciudad pintoresca y acogedora de la zona de Boston, Plymouth es un destino de excursión fácil y que merece totalmente la pena.

5. Rockport y Bearskin Neck: Magia costera con un toque creativo

Si busca el puro encanto de Nueva Inglaterra envuelto en un entorno artístico frente al mar, diríjase al norte de Boston, a Rockport, una de las ciudades más pintorescas de la costa norte de Massachusetts. Este pintoresco pueblo, encaramado al borde del océano Atlántico, es un sueño para cualquiera que busque belleza, inspiración y una buena dosis de aire marino.

En el corazón de Rockport se encuentra Bearskin Neck, una estrecha península repleta de tiendas de recuerdos, galerías de arte y chiringuitos de marisco, todo ello enclavado en una costa escarpada y rocosa. Es uno de los lugares más pintorescos para una excursión costera de un día, con impresionantes vistas a cada paso. También podrá ver el Motivo nº 1, uno de los edificios más pintados del mundo y símbolo de la costa de Nueva Inglaterra.

Esta zona es ideal para viajeros de todas las edades, especialmente familias y parejas que busquen una excursión romántica o con niños desde Boston. Las playas de esta zona son pequeñas pero encantadoras, y cuando la marea está baja, los niños pueden disfrutar de una actividad divertida y educativa. No olvide comprar un rollo de langosta o un dulce de la zona antes de marcharse.

Añada una parada en el cercano Parque Estatal de Halibut Point o simplemente acomódese en un banco con vistas al puerto. Rockport ofrece esa rara combinación de encanto relajado y belleza natural que te hace sentir que el tiempo se ha ralentizado, sólo por un rato.

6. Islas del puerto de Boston: Una escapada salvaje a las afueras de la ciudad

No hay que ir muy lejos para vivir una aventura isleña: basta con coger un transbordador desde el centro de la ciudad y explorar las islas del puerto de Boston, una joya oculta en el mismo patio trasero de la ciudad. Este destino, a menudo pasado por alto, ofrece un refrescante cambio de ritmo, tanto si busca senderismo costero, historia o simplemente un poco de espacio para respirar.

Una de las paradas más populares es Georges Island, donde se encuentra el histórico Fort Warren, un fuerte de la época de la Guerra Civil con túneles para explorar y amplias vistas del puerto. En Spectacle Island encontrará senderos, playas y el punto más alto del puerto de Boston, que ofrece impresionantes vistas del horizonte y los ecosistemas marinos circundantes.

¿Una de las mayores ventajas? Parece estar a un mundo de distancia, pero está a menos de una hora del paseo marítimo de Boston. Con menos aglomeraciones que muchos lugares del continente, las islas Harbor son una excelente elección para pasar un día relajado que combine una aventura ligera con naturaleza y tranquilidad.

Ideal tanto para niños pequeños como para adultos, se puede practicar senderismo, picnic o natación, según la isla y la estación del año. Y si visitas la isla al atardecer, la luz sobre el agua es impresionante, perfecta para captar el clásico ambiente costero de Nueva Inglaterra.

7. Salem y Marblehead: Historia costera y encanto embrujado

A poca distancia de Boston, las ciudades de Salem y Marblehead ofrecen una mezcla inigualable de historia, vistas al mar y esa inconfundible mística de Nueva Inglaterra. Aunque la mayoría de la gente conoce Salem por su espeluznante pasado, también es una hermosa excursión costera de un día con mucha personalidad.

En Salem, puede visitar la Casa de los Siete Tejados o explorar el excepcional Museo Peabody Essex, donde las lápidas erosionadas cuentan historias centenarias. Las calles de la ciudad están llenas de tiendas de recuerdos, cafés y arquitectura histórica que le transportarán directamente a las páginas de una novela de la época colonial, especialmente en octubre, cuando la energía de Halloween está en su apogeo.

Justo al lado, Marblehead aporta un ambiente más tranquilo y marítimo. Esta ciudad costera cuenta con uno de los puertos más pintorescos de la zona de Boston, salpicado de veleros y enmarcado por costas rocosas. Pasee por Main Street, eche un vistazo a las tiendas de antigüedades y disfrute de una comida marinera con vistas al puerto. Sólo el paisaje ya es razón suficiente para ir.

Juntas, Salem y Marblehead forman una combinación ideal para los viajeros interesados en la historia, el misterio y las impresionantes vistas costeras, todo elloa poca distancia de la ciudad.

8. Portsmouth y la costa de New Hampshire: Pequeñas ciudades, grandes vistas

Diríjase un poco más al norte y llegará a la encantadora ciudad portuaria de Portsmouth, New Hampshire, un destino compacto pero vibrante, rico en historia, personalidad y belleza costera. Es uno de los viajes más infravalorados desde Boston, pero una vez que haya estado, se preguntará por qué no fue antes.

Pasee por el centro de Portsmouth, donde los edificios coloniales se encuentran con restaurantes de moda, y las boutiques se esconden entre casas históricas y plazas sombreadas. Cerca de allí, encontrará tramos de la costa de New Hampshire, donde le esperan playas espectaculares, faros emblemáticos y marisco fresco.

Esta zona es el sueño de cualquier viajero, ideal para un viaje panorámico con paradas por el camino. Las primeras horas de la tarde son un buen momento para llegar, ya que la puesta de sol proyecta un resplandor dorado sobre el puerto y los excursionistas empiezan a dispersarse.

Tanto si le apetece un relajado día de compras, un relajante paseo por la playa o un festín de marisco junto al agua, Portsmouth y la costa cercana ofrecen la mezcla perfecta de encanto de la vieja escuela y elegancia informal.

9. Paradas extra para los aficionados a la cultura

Si quiere añadir un poco de cultura a sus exploraciones veraniegas, hay muchos lugares a las afueras de Boston que ofrecen historia y ambiente.

El Museo de Concord, por ejemplo, es una excursión rápida para cualquier persona interesada en el pasado literario y revolucionario de Estados Unidos. Acompáñalo de un paseo por el cementerio de Sleepy Hollow, donde trascendentalistas como Thoreau y Emerson descansan entre los árboles.

Puede que estos desvíos por el interior no ofrezcan acceso a la playa, pero aportan una profundidad diferente a su verano en Nueva Inglaterra, arraigada en los orígenes mismos del país. Combínelos con una comida en el río Charles o un paseo al atardecer por la explanada del río Charles, y tendrá un día de verano completo.

Conclusiones: Aproveche al máximo el verano en Nueva Inglaterra

Tanto si busca el follaje otoñal en octubre como si disfruta del clima cálido junto al océano, el verano en Nueva Inglaterra ofrece algo para cada viajero. Desde las islas del puerto de Boston hasta Martha's Vineyard, desde la opulencia de Newport hasta las brisas saladas de Cape Cod, cada excursión de un día desde Boston es una oportunidad única para descubrir qué hace tan especial a este rincón del mundo.

La mayoría de estos destinos están a sólo un paseo en coche o en ferry, por lo que son fáciles de añadir a su itinerario por Boston, especialmente si viaja con niños pequeños, planea una escapada romántica o simplemente le apetece pasar un rato junto al mar. Tanto si viaja con un guía turístico, como si lo hace por su cuenta o combina varias paradas a lo largo de varios fines de semana, la costa le llama.

Así que adelante: prepare la bolsa de playa, llene el depósito y empiece a explorar. Estas excursiones costeras de un día desde Boston no solo son factibles, sino que merecen la pena.